Alojamiento en Plataformas Digitales: Diversificación de Alternativas para Viajeros
Turismo

Alojamiento en Plataformas Digitales: Diversificación de Alternativas para Viajeros

Ernesto Piedras 

Hoy viajeros nacionales e internacionales cuentan con más y cada vez más diversas alternativas de alojamiento para la realización de viajes de negocios, placer, culturales, de carretera, gastronómicos, entre otros, a partir de la creciente oferta de Estancias de Corto Plazo (ECP) disponibles en plataformas digitales.

Una ECP consiste en un espacio compartido por un anfitrión vía un sitio web o aplicación móvil. Estos pueden ser un sofá-cama, cama, habitación privada, cuartos de hotel hasta casas o departamentos completos, cuya disponibilidad depende de la decisión de los anfitriones.

Entre sus características principales destacan: su ajuste a los diferentes niveles presupuestales de los viajeros, la oferta de seguridad y soporte en el alojamiento, la disponibilidad en lugares únicos y diversificación de los destinos turísticos, así como su ajuste e incorporación oportuna de mejoras a partir de la retroalimentación de los huéspedes.

El sector turístico, toral para la economía mexicana, hoy cuenta con ofertas diferenciadas que abonan a la tradicional disponible (hoteles) y que potencian su dinamismo y contribución económica, el de las comunidades locales en las que se encuentran estos espacios compartidos, el de pequeños negocios e incluso otros sectores productivos.

El estudio titulado “Contribución Económica de la Oferta de Estancias de Corto Plazo (ECP) en México” y desarrollado por The Competitive Intelligence Unit (The CIU) identifica y cuantifica la cadena de valor del mercado de ECP en el país, su fomento a la creación de empleo, su impacto económico indirecto hacia otros sectores, negocios y familias y, en su conjunto, su contribución al aparato productivo nacional.[1]

Disponibilidad y Ocupación de ECP en México

De acuerdo con el estudio, la disponibilidad de alojamientos hoteleros tradicionales en todo el país alcanza 836,300 habitaciones (71.7% del total de espacios para alojamiento), un crecimiento de 20.8% en su comparativo con la cifra de 2014, año en el que registraban una capacidad disponible de 692,351 habitaciones.

Ello evidencia que el segmento de hospitalidad tradicional ha seguido creciendo, a pesar de la dinámica acelerada de crecimiento en la oferta de ECP que registra una disponibilidad estimada de 329,541 espacios (28.3% del total)[2] comparado con 12,704 en 2014. Entre estos dos terceras partes (66.0%) son casas o departamentos completos, 31.2% habitaciones privadas, 1.6% cuartos de hotel y sólo 1.3% se trata de espacios compartidos.

(*) Cifra estimada
Fuente: Elaborado por The Competitive Intelligence Unit con información de la Cuenta Satélite de Turismo 2019 (INEGI) y de oferta de ECP

Una diferencia importante entre ambos tipos de espacios para alojamiento es que mientras que la oferta tradicional (hoteles) está disponible los 365 días del año, en el caso de las ECP en ocasiones se encuentran activas sólo fines de semana o en fechas determinadas por los anfitriones.

En términos de ocupación, la adición de la oferta de ECP incrementaría en 16.8 millones de noches ocupadas o 9.8% entre el total de alternativas de alojamiento (incluidos hoteles) durante 2021. Esta puede ser interpretada como su participación de mercado efectiva.

Oferta de ECP: Diversificación de Destinos y Democratización del Turismo

La oferta de ECP ha contribuido significativamente a la diversificación de alternativas para viajeros, especialmente en aquellas zonas de difícil acceso, en las que los jugadores tradicionales no tienen alcance.

Las ECP se han constituido como un catalizador de la actividad turística al interior de aquellos estados que registran un menor flujo de turistas. Los casos más destacados son: Colima, Morelos, Tabasco y Yucatán, entidades que se encuentran entre las primeras 10 con menor llegada de turistas pero que registran una mayor proporción de ECP entre el total de alternativas de alojamiento turístico, circunstancia que ha potenciado su sector turístico y las economías locales.

Por otro lado, se estima que en promedio la tarifa por noche en una habitación en una ECP es 40% menor a aquella de ese mismo espacio ofrecido por jugadores tradicionales, al registrar un nivel de $995 pesos en el primer caso frente a uno de $1,661 pesos en este último, impuestos incluidos al cumplir ambas con sus obligaciones fiscales.[3]

En el caso de los establecimientos hoteleros el mayor precio deriva de que se proveen servicios adicionales al alojamiento como lo son la oferta de alimentos y bebidas preparados a la habitación, la recepción de los huéspedes, restaurante y bar, alberca, gimnasio, entre otros.

Lo anterior evidencia que, en promedio, los viajeros pueden efectivamente encontrar menores precios en las alternativas ofrecidas a través de medios digitales, lo que posibilita que una cantidad creciente de la población pueda realizar viajes al interior del país.

En otras palabras, la oferta de ECP democratiza el turismo para los mexicanos.

Creación de Empleos y Derrama Económica en 2021

La oferta de Estancias de Corto Plazo (ECP) se ha configurado como una fuerza de demanda laboral local relevante en el sector turismo, con el potencial de mejorar las condiciones de los trabajadores, al generar mayores alternativas de empleo y aumentar así, su capacidad de negociación y de consecuentes aumentos salariales o mejoras en sus prestaciones.

Al respecto, la “Encuesta a Anfitriones de ECP” realizado por The CIU identificó que 25.8% de las ECP emplea trabajadores para el funcionamiento de su alojamiento, hecho que puede explicarse por la especialización de este servicio y por la calidad requerida para la provisión de éstas.

De acuerdo con estimaciones basadas en la Cuenta Satélite de Turismo 2019 publicadas por el INEGI en conjunto con la Secretaría de Turismo, en México, las ECP denominadas como alojamientos en propiedad de casas de vacaciones generarán 31,563 puestos de trabajo ocupados remunerados en 2021, cifra que representa 15.8% del empleo total dedicado a los servicios de alojamiento para viajeros.[4]

No obstante, un cálculo extendido de individuos que han emprendido y generado ingresos a partir de la oferta y empleo de ECP resulta en 192 mil oportunidades individuales remuneradas que incluyen a anfitriones y personal contratado.

Una característica del servicio de ECP es que su derrama económica alcanza a pequeños negocios y sectores de la economía que no son usualmente beneficiados por la oferta tradicional, por ejemplo, restaurantes, transporte y entretenimiento, entre otros.

Al respecto, se proyecta que el agregado de contribuciones económicas derivadas de la oferta de ECP ascenderá a un monto aproximado de $95,806 mdp en 2021. Esta cifra incluye la derrama económica indirecta que deja el gasto de los viajeros en lo principal a pequeños negocios incluidos restaurantes, tiendas minoristas y sitios culturales ($78,138 mdp), la derrama salarial del empleo generado ($976.5 mdp) y los ingresos que se generan para anfitriones y plataformas por la disponibilidad de ECP ($16,691 mdp).

Todo lo aquí referido, ilustra la creciente importancia directa e indirecta de las ECP e influencia sobre el dinamismo del sector turismo, de las economías locales en las que tienen presencia estas alternativas de alojamiento, así como en el aparato productivo nacional. Ello, al ser vía de creación de empleos, ejercicio de recursos de inversión, erogación en bienes y servicios, ingresos fiscales y consecuentemente, catalizadoras del crecimiento y desarrollo de pequeños negocios, de familias y del país en su conjunto.

Las ECP son y han sido una solución a las necesidades de los viajeros en tiempos pandémicos, al dotar de alternativas seguras, adaptables a las condiciones de trabajo remoto, con disponibilidad en destinos únicos y/o con poca afluencia de personas. Al mismo tiempo, benefician la reactivación del turismo doméstico en las pequeñas localidades y ciudades, así como en destinos no tan concurridos y de naturaleza.

Su oferta es diferenciada, lo que permite a viajeros obtener experiencias enriquecidas del destino turístico al que se trasladan. Al expandir la oferta y diversificar las alternativas de alojamiento, las ECP contribuyen a los cuatro objetivos prioritarios para el sector turismo, a saber: “un enfoque social y de respeto de los derechos humanos en la actividad turística del país; impulsar el desarrollo equilibrado de los destinos turísticos de México; fortalecer la diversificación de mercados turísticos en los ámbitos nacional e internacional; y, fomentar el turismo sostenible en el territorio nacional”.[5]


[1] The CIU White Papers Series (05-2021), Contribución Económica de la Oferta de Estancias de Corto Plazo (ECP) en México. Disponible en: https://bit.ly/3yq2Baz

[2] Esta cifra considera anuncios de Estancias de Corto Plazo ECP, por ejemplo, una casa puede estar anunciada como casa completa y al mismo tiempo sus habitaciones individuales pueden estar anunciadas de manera independiente, resultando en varios anuncios de ECP para una misma propiedad. Además de que una misma propiedad puede estar enlistada en varias plataformas a la vez. Por ende, el número de anuncios de ECP no es representativo del universo de propiedades que están siendo ofertadas en modalidad de ECP.

[3] Este cálculo está basado en información proveniente de la Cuenta Satélite de Turismo, encuestas realizadas por The CIU a anfitriones y viajeros de ECP, considerando un promedio de tarifas de habitaciones de hotel y de ECP (incluyendo aquellas que cuentan con más de una habitación).

[4] INEGI (2019). Cuenta Satélite Turismo 2019. DATATUR/SECTUR. Disponible en https://bit.ly/3ocTlDg

[5] Secretaría de Turismo, Programa Sectorial de Turismo 2020-2024 (PROSECTUR 2020-2024), p. 24. Disponible en: https://bit.ly/3hD3LdK 

14 de septiembre de 2021