Cultura

Con el estreno de Walled Unwalled [Muros desmontados], obra de Lawrence Abu Hamdan que se presenta en la Sala10, el MUAC continúa su programa de actividades virtuales

En el Museo Universitario Arte Contemporáneo (MUAC) estrenamos en Sala10 Walled Unwalled [Muros desmontados], obra de Lawrence Abu Hamdan (investigador y especialista en sonido) en la que se pone en evidencia la riqueza informativa del ruido y su relación con los muros y paredes, cómo y quiénes lo filtran para beneficio político y militar; así como su uso en casos legales y en tortura.

Como parte de la programación #MUACdondeEstés, estarán disponibles “New Order/Nueva normalidad”, el episodio ocho del podcast Gran Hotel Abismo, en el que el artista visual Vicente Razo habla sobre la ruptura del tiempo cotidiano a causa del confinamiento por la pandemia, y también una serie de obras compuestas por alumnos del Seminario Interdisciplinario de Interpretación de la Facultad de Música de la UNAM.

Una conferencia performativa

Lawrence Abu Hamdan (Amán, Jordania, 1985; actualmente radica en Dubai) se ha especializado en una rama del conocimiento que históricamente ha sido subestimada en la cultura occidental: el ruido, y ha dominado el poder de la escucha, del que los gobiernos abusan continuamente por medio de diversas tecnologías.

Abu Hamdan ahonda en el conocimiento del ruido; lo hace mediante dos frentes paralelos: desde el arte y desde su carrera como private ear (oreja privada), una especie de investigador privado sonoro que trabaja en ámbitos legales internacionales y que colabora con organizaciones defensoras de derechos humanos, como Forensic Architecture (Arquitectura Forense), Defence for Children International (Defensa de los Niños Internacional) y Amnistía Internacional.

En Walled Unwalled [Muros desmontados] Hamdan hace una conferencia performativa que recorre una serie de casos legales e históricos —cuyo debate central giró alrededor de evidencia escuchada a través de paredes— para llegar a un diagnóstico sobre el uso político y social de toda clase de muros. La disertación, dice Alejandra Labastida, curadora de este proyecto, se interesa por la multiplicación de los muros fronterizos y por la permeabilidad de las paredes de casas, pirámides, cárceles y hasta la atmósfera del planeta. Mientras los Estados construyen bardas fronterizas para excluir migrantes, sus policías y ejércitos espían lo que ocurre detrás de las paredes, violando la privacidad de las personas.

Para profundizar en ello, Abu Hamdan presenta el concepto de la muografía: una técnica que genera imágenes de lo que se encuentra detrás de los muros sin alterarlos físicamente. Los muones son partículas elementales y cósmicas altamente penetrantes que constantemente bañan nuestro planeta; pueden cosecharse para realizar estudios arqueológicos y de vulcanología porque traspasan rocas, cemento, plomo. El otro lado de la moneda es que abren la puerta al mejor sistema de vigilancia que ha existido.

Esta pieza, comenta la curadora, también sustenta la tesis de Abu Hamdan sobre la relación ambigua y altamente distorsionada que tenemos con el ruido. “Buena parte de nuestro imaginario y vocabulario sonoros está construida artificialmente por la radio, el cine y la televisión, al grado de que muchos no reconoceríamos, por ejemplo, el sonido real de un disparo. El video Walled Unwalled se desarrolla en un estudio de grabación, donde constantemente se producen sonidos artificiales que buscan recrear los auténticos. Pero no se trata de cualquier estudio, sino del Funkhaus, que fue sede entre 1952 y 1991 de la radio oficial de la República Democrática Alemana en el Este de Berlín. Este escenario es un elemento más del discurso del artista. Una parte de la Guerra Fría se libró mediante transmisiones radiofónicas que pretendían, según el bando político, atravesar o preservar un muro: la Cortina de Hierro. Como en muchas de sus investigaciones legales, Abu Hamdan invierte el propósito del estudio de grabación para utilizarlo como un lugar de experimentación y producción de verdad”.

A pesar de que el monólogo de esta pieza se conforma principalmente por sonido verbal, su ritmo se diseñó para activar nuestra imaginación y sensibilidad sonoras. La partitura del artista incluye su voz, material visual y sonoro de archivo y un ominoso solo de batería. Estos elementos se combinan con una coreografía de paneles y muros que aparecen y desaparecen mientras Abu Hamdan recorre las tres cabinas del estudio. El experimento en conjunto se propone desmantelar la noción occidental de que el sonido es un excedente sin discurso.

31 de julio de 2020