Diego Ríos
Esta tarde, dos bandos se disputaron las tendencias más populares en Twitter, red sociodigital donde la cuenta del Canal Once difundió anoche un fragmento del programa “De Buena Fe”, conducido por Estefanía Veloz y Gibrán Ramírez, donde se hizo un análisis del estilo humorístico y editorial empleado por Víctor Trujillo, en su papel del payaso Brozo:
“La mala fe de los reaccionarios en México les ha llevado a usar múltiples disfraces con tal de hacerse un lugar en la discusión pública. Algunas veces se han presentado como expertos epidemiólogos, otras como defensores de los derechos humanos, y no ha faltado la ocasión en que se han denominado feministas, a pesar de su conservadurismo. Y cuando ya de plano se les agota la imaginación, se enfundan en su piel más natural, la del payaso vagabundo, para ellos no hay mejor representante que el comediante o periodista, Víctor Trujillo, mejor conocido como Brozo”.
Estas fueron las palabras que provocaron la reacción de Víctor Trujillo, quien se dijo en son de burla, honrado porque la televisión educativa y cultural del país lo considerara entre sus contenidos:
Tuit que fue secundado por grupos de bots y cuentas falsas que usualmente son usadas para campañas de desprestigio contra cualquier medida del gobierno federal, y para retuitear hasta la más mínima publicación de cualquier opositor al presidente Andrés Manuel López Obrador.
Tal es el caso de la cuenta @DonPorfifirio, que a inicio de este año fue señalada por el activista español Julián Macías, entre las promotoras de ataques coordinados contra el gobierno federal y usada con regularidad para defender y posicionar los tweets del también periodista, Carlos Loret de Mola.
El que Canal Once sea un medio público, fue un factor determinante para las cuentas que en perfecta sincronía, acusaron durante todo el día un uso incorrecto de los impuestos al hecho de que la presentadora revelara mediante un análisis personal, “que Víctor Trujillo ha perdido toda credibilidad que algún día tuvo”.
Canal Once es una concesión administrada por el Instituto Politécnico Nacional, donde abundan los programas de análisis como el caso de “De Buena Fe”, donde sus conductores exhiben fake news producidas en otros medios de comunicación, y opinan sobre los protagonistas de las campañas sucias que por medio de infodemia, buscan desacreditar todo esfuerzo por contrarrestar el Covid-19 en México.
Otros programas de opinión producidos por Canal Once son “Primer Plano”, donde se abordan temas políticos desde todos los extremos con pluralidad y libertad. “Diálogos en confianza”, donde especialistas comentan y expresan sus opiniones sobre temas de vida saludable. Y “Sacro y Profano”, conducido por del sociólogo Bernardo Barranco, donde con absoluta libertad de expresión y en un ejercicio de laicidad, teólogos y representantes de las diferentes religiones, diseccionan los temas religiosos y su vínculo con la sociedad y política mexicana.
El análisis de Estefanía Veloz surge de la última sátira expresada por Brozo en LatinUs, donde el ex conductor de Televisa acusó que la aplicación de las vacunas para Covid-19, podrían ser utilizadas con intenciones electorales. Ante lo que la conductora estimó:
“Por medio de una retahíla, según él muy irreverente, el humorista reconocido por el uso misógino de personajes femeninos en sus programas, criticó en su espacio dentro del portal LatinUs que el plan de vacunación del gobierno mexicano no considere la participación del sector privado. Se mostró suspicaz con esta medida, pues cree que cabe la posibilidad de que sirvan como instrumento político para favorecer al proyecto del presidente en las elecciones del próximo año”.
Lo dicho por Veloz fue suficiente para desencadenar un encuentro entre bandos, que llevó a censurar en Facebook el mismo promocional que desató la polémica en Twitter, ante lo que la cuenta oficial de “De Buena Fe” acusó de hipocresía las denuncias que llevaron a la red sociodigital a bajar el contenido:
