Este jueves, a las 18:30 hora local de Inglaterra, el Palacio de Buckingham confirmó el fallecimiento de la Reina Isabel II, a los 96 años, después de haber cumplido siete décadas como monarca.
La Reina Isabel II pasó sus últimas horas en su residencia de Balmoral rodeada por su familia: el heredero al trono Carlos de Inglaterra y su esposa Camilla Parker-Bowles; sus otros hijos, los príncipes Andrés, Eduardo y Ana, así como nietos y bisnietos, quienes llegaron a la residencia de Balmoral después de que los médicos expresaran preocupación por el estado de salud de la monarca.
Frente al Palacio de Buckingham se congregaron miles de personas a la espera de novedades y, según informa BBC News Mundo, muchos comenzaron a llorar al conocer la noticia del fallecimiento de Isabel II.
Elizabeth Alexandra Mary Windsor, nombre de nacimiento antes de ser coronada, no supo que estaba destinada al trono sino hasta que su padre, el rey Jorge VI, asumió el reinado después de la abdicación de su tío Eduardo VIII; de hecho, fue la primera mujer que presenció la coronación de sus padres siendo ella la posible heredera.
Si bien la Reina Isabel II era la hija primogénita, cuando sus padres, el rey Jorge VI y la Reina Isabel, fueron coronados en 1936, no era seguro que fuera ella la heredera del trono, pues las leyes vigentes en aquel entonces estipulaban que de nacer un hijo varón, sería él quien lo asumiera. Sin embargo, Isabel llegó a los 25 años siendo la única opción para asumir la corona, y así sucedió, cuando su padre falleció por cáncer de pulmón y ella se convirtió en monarca de Gran Bretaña e Irlanda del Norte el 6 de febrero de 1952.
En 1949 la Reina Isabel II se casó con Felipe, nacido como príncipe de Grecia y Dinamarca, quien tuvo que renunciar a su título de nacimiento para pasar a ser un ciudadano británico; sin embargo, a la par se le otorgaron los títulos de duque de Edimburgo, conde de Merioneth y barón de Greenwich. La historia de amor entre él y la Reina Isabel II estuvo rodeada de rumores y estrictos protocolos (como los que tuvo que cumplir para casarse); no obstante, permanecieron juntos hasta la muerte del príncipe Felipe, la cual ocurrió el 9 de abril de 2021.
La imagen de Isabel II se convirtió en una de las más destacadas y representativas del Reino Unido, demostró hasta el final de su reinado ser apreciada y respetada por una parte importante de los británicos. «Cuando tenía 21 años, prometí mi vida al servicio de nuestra gente y pedí ayuda a Dios para cumplir ese voto. Aunque ese voto se hizo en mis años de juventud, cuando estaba verde en juicio, no me arrepiento ni me retracto de una sola palabra», reiteró la Reina Isabel en el discurso de su Jubileo de plata.
