La misión de la Sedena es recuperar la salud de los enfermos con COVID-19
Salud

La misión de la Sedena es recuperar la salud de los enfermos con COVID-19

La pandemia del COVID-19 obligó a muchas instituciones del país a destinar infraestructura y recursos humanos para combatir la temible pandemia del coronavirus, es el caso de la Secretaria de la Defensa Nacional, que habilitó instalaciones del Heróico Colegio Militar en Tlalpan, Ciudad de México.  

Carlos Padilla Ríos

-¿Cuál es el protocolo para el cuidado del personal médico?

–Seguimos las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, que incluye nuestro traje de protección, googles, cubre bocas KN-95, guantes, cubre botas, y todo el equipo desechable. Podemos garantizar este protocolo de bioseguridad al profesional de la salud. Siempre que lo respeten se encontrarán a salvo.

En la Secretaria de la Defensa Nacional cumplimos la misión de atender a compatriotas contagiados del virus SARS-CoV-2 en la mejor forma y empeño para que nuestros pacientes recuperen su salud. Nos debemos al pueblo de México como instituto armado, estamos para servirles. Así se expresa el Mayor Médico Cirujano, Jacinto Salazar León, otorrinolaringólogo, asesor técnico de Terapia Intensiva y Hospitalización de COVID-19 del 81 Batallón de Infantería y Escuela Militar de Infantería de la Secretaría de la Defensa Nacional, y responsable de esa instalación.

–¿Han tenido contagios aquí dentro?

–Sí, afortunadamente sólo dos casos leves. Ya están de regreso, realizando sus actividades normales. Estamos en un área infecto-contagiosa per se. Es una situación emergente, con un virus muy contagioso. Cuando no se respetan los protocolos de bioseguridad se comete un error. Nosotros seguimos invitándolos a cuidar su salud, que es lo más valioso para el ser humano.

–¿Cuál es el protocolo para el ingreso de un paciente?

–A través del Centro Regulatorio de Urgencias Médicas de la Secretaría de la Defensa Nacional, se coordina el traslado a nuestro Centro de Atención Médica. La otra modalidad, corresponde a quienes llegan por propio pie.

–¿Los reciben tengan o no Seguridad Social?

–En efecto, atendemos a cualquier compatriota frente al COVID-19. Es preocupación del Alto Mando que la gente sepa que el Ejército Mexicano los respalda. Es un esfuerzo titánico y una bendición. Como servidores públicos nos debemos al pueblo y estamos comprometidos en esta labor.

–¿Cuál es el proceso para hospitalizar a un paciente, qué se le dice a su familia?

–El proceso inicia en la instalación del Triage (módulo a la entrada de la instalación) donde se realiza una valoración inicial, de acuerdo con ésta y los parámetros que el paciente presente, se decide si se le canaliza a hospitalización o terapia intensiva. Si no lo necesita, egresa con tratamiento ambulatorio. Dependiendo del área se siguen diferentes protocolos, según la severidad del caso. En hospitalización se da atención multidisciplinaria. Si requiere cuidados críticos, derivados del COVID-19, ingresa a Terapia Intensiva, con especialistas en cuidados críticos. En el área de Trabajo Social se labora en conjunto para que tengan comunicación con su enfermo. Por su problema infecto-contagioso no puede recibir visitas. También cuidamos la salud mental de nuestro personal en el área médica.

–¿Qué se recomienda a los casos leves?

–Envío a casa y tratamiento sintomático. Si tiene fiebre prescribimos un analgésico y siempre hacemos énfasis en recomendaciones de higiene, aislamiento, de 7 a 14 días, lavado constante de manos, uso de cubre bocas en casa.

-¿A partir de cuándo comenzó a dar servicio esta área?, se le pregunta a Salazar León en las instalaciones del 81 Batallón de Infantería.

–Eran dormitorios militares. Iniciamos la reconversión a principios de abril. Tomó de tres a cuatro semanas y actualmente está dividida en hospitalización de mujeres y hombres para 80 pacientes. El Área de Cuidado Intensivo para 20. Se pueden internar hasta 100 personas. Son áreas completamente equipadas, con medicinas e insumos idóneos. Comenzamos el 21 de mayo y a la fecha hemos atendido más de 280 pacientes, de los cuales 91 por ciento egresaron por mejoría; 26 personas perdieron la vida. Trabajamos para ofrecerles calidez en esta terrible tragedia, a ellos y sus familias.

–¿Cómo deben cuidar los familiares a su enfermo?

–Debe ser un espacio ventilado, donde no entren y salgan todos, que eviten el contacto con el paciente, quien debe usar cubre bocas en casa, porque él tiene la carga viral. Es necesaria la higiene constante de manos del paciente. Lo principal es mantener desinfectadas las áreas comunes. Pueden realizar sus actividades normales, pero en aislamiento.

2 de septiembre de 2020