Milenio, el caso Debanhi y la televisión regiomontana
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Milenio, el caso Debanhi y la televisión regiomontana

Alejandro Navarrete*

Multimedios (grupo Milenio) ha exportado desde Monterrey al resto del país prácticas lamentables en televisión, aunque también formatos ágiles y conductores talentosos para noticias.

Las “chicas del clima”, conductoras delgadas en ropa sexy, fue un “formato”, si bien no único de Monterrey ni en el mundo desde luego, que el grupo exportó de sus señales locales a su canal nacional de Milenio Televisión.

Sin embargo, el propio Milenio Televisión se ha vuelto un referente importante en las noticias, con segmentos ágiles y periodistas incisivos e inteligentes que han refrescado la televisión nacional como la propia Azucena Uresti, ahora en el ojo del huracán por el caso Debanhi Escobar.

De izquierda a derecha: el fiscal general de Nuevo León, Gustavo Adolfo Guerrero Gutiérrez (segundo), y Mario Escobar, padre de Debanhi (tercero), en conferencia de prensa.

En ese sentido, Grupo Milenio, que en Monterrey es el rey y marca la pauta a las otras dos televisoras nacionales, es una especie de Jekyll y Mr. Hyde que busca ofrecer telebasura, misógina, vulgar y oficialista por un lado y por el otro, periodismo profesional, crítico y con credibilidad.

Esas contradicciones y tensiones parecen haber quedado evidenciadas precisamente en el tema del caso de Debanhi Escobar, pero van mucho más allá.

El feminicidio como broma y la mujer como objeto

La televisión regiomontana es un “Sabadazo” de toda la semana (por usar referencias de la televisión nacional). Domina el “entretenimiento” burdo, simplón y vulgar, el sexismo y, además, la imagen y versiones de los gobernantes en el aspecto noticioso.

En la TV de Monterrey, la exhibición de la mujer como objeto sexual no es algo único de las conductoras “del clima”. Más bien es una constante.

En la tarde, en la noche, en diferentes horas, es posible ver cómo se exhibe a mujeres en poca ropa (paradas o bailando) sólo como escenografía para los conductores que hacen chistes vulgares y populacheros.

Así, por años se pudo ver a Mario Bezares con un programa lleno de jovencitas (y ahí jovencitos también) vestidas como meseras sexys o se puede ver todas las noches al exconductor deportivo ahora estrella del “entretenimiento” de la televisora, Ernesto Chavana, con mujeres en minifalda. En Televisa y TV Azteca hay programas y fenómenos similares.

Con aparente orgullo, Grupo Milenio ha llevado esto a la televisión nacional y en su Canal 6 de la Ciudad de México ahora es posible ver al “Chavana” e incluso al comediante Adrián Marcelo quien causara polémica en el 2019 por bromear con los feminicidios en una narración deportiva.

“Prácticamente fue un feminicidio: (a la pelota) la deja muerta ahí en el área”, afirmó el conductor a quien Grupo Milenio ahora le ha dado un programa nacional semanal.

Milenio TV y Azucena Uresti, de Monterrey para México

Independientemente de sus contenidos, la producción televisiva en Monterrey es de gran calidad, y Grupo Milenio tuvo un acierto al crear Milenio TV con segmentos de noticias ágiles, frescos y bien producidos.

En sus inicios, Milenio TV le apostó a sus figuras nacionales, como Ciro Gómez Leyva, Carlos Marín y Carlos Puig, pero el canal tuvo su pico y declive de popularidad muy pronto, cuando comenzó a caracterizarse por las entrevistas muy “a modo” de gobernadores y candidatos y con el escándalo de las encuestas totalmente equivocadas de GEA/ISA con Gómez Leyva que daban más puntos a Peña Nieto.

Sin embargo, en los últimos años, Milenio TV recobró credibilidad y cobraron fuerza otras figuras más jóvenes como Azucena Uresti, periodista que venía de la pantalla regiomontana.

Hasta el 2014, Uresti fue la conductora acompañante del conductor del noticiario estelar nocturno de la ciudad y de Multimedios, el “Arquitecto” Héctor Benavides. Pero los líderes del grupo le vieron potencial para destacar en Milenio Televisión.

Como muchos de sus compañeros, como Carlos Zúñiga, Uresti comenzó primero gradualmente apareciendo a cuadro nacional, con una cara seria y más profesional, pero alternando apariciones aun con los conductores locales, en donde tenían que fungir más como patiños alcahuetes de los “chistes” de los titulares de los noticiarios locales.

Sin embargo, ya en Milenio TV, Uresti logró destacar fuertemente. En 2018 fue elegida moderadora del primer debate presidencial, junto con Denise Maerker y Sergio Sarmiento, y a partir del 2019 se convirtió en la conductora del noticiario estelar de las 22:00 horas.

Allí, ha destacado por hacer entrevistas y comentarios críticos e incisivos y por enarbolar una bandera feminista y defender la equidad de género.

La TV regiomontana y el caso Debanhi

Precisamente por su defensa del feminismo y la equidad, fue muy contradictorio y notorio el tratamiento de Azucena Uresti con los videos que filtró en su noticiario sobre el caso Debanhi.

Debanhi Escobar.

Parte de la ciudadanía, a través de redes sociales, cuestionó que revictimizara a Debanhi presentando el video filtrado de cuando compraba alcohol con sus amigas en un OXXO y también que insinuara al aire que llevaba en su bolsa algo que la haría ver mal.

“Por respeto a la familia, no voy a revelar lo que nos han dicho extraoficialmente respecto a qué tenía al interior de la bolsa”, dijo al aire.

Sin embargo, esa estrategia de apoyar (voluntaria o involuntariamente) la narrativa que convenía a la fiscalía de Nuevo León y el presunto “apoyo” a ésta que se manifestó en el mensaje de WhatsApp que se mandó desde su celular por error al papá de Debanhi Escobar, es algo que va más allá de conductora.

En el segundo noticiario con más audiencia de Multimedios en Monterrey, el día anterior a la filtración de videos de Uresti, la conductora, la “Licenciada María Julia Lafuente” había encarado al papá de Debanhi (casi como si fuera un presunto culpable) y presionado para validar la versión de la fiscalía.

Al otro día, el mismo en el que en la noche Uresti hablaría de la bolsa de Debanhi, Televisa y TV Azteca entrevistaron por primera vez al aire a testigos clave del caso, las amigas y el chofer, los tres coincidiendo en el estado lamentable en que habían visto a Debanhi.

Esos dos días, las informaciones del caso se presentaron así:

  • 26 de abril: Multimedios Monterrey (Grupo Milenio): entrevista a papá de Debanhi en donde se le presiona para validar versión de fiscalía.
  • 27 de abril: Televisa Monterrey: entrevista a amigas; hablan de que Debanhi andaba muy tomada y se comportó conflictivamente.
  • 27 de abril: TV Azteca Monterrey: entrevista al chofer que subió Debanhi; habla y presenta audios de Debanhi que la hacían oír como tomada o droga.
  • 27 de abril: Milenio TV: Azucena Uresti presenta videos, incluyendo uno donde Debanhi y amigas compran alcohol; insinúa que había cosas malas en su bolsa.

En el intercambio que tuvieron en Radio Fórmula Uresti y Rafael Barajas “El Fisgón” un día después de que el papá de Debanhi exhibiera los mensajes del celular de Uresti, él cuestionó su ética periodística y ella se defendió diciendo que la fiscalía brindaba información a varios medios y que lo que hacían en su espacio era periodismo de investigación.

En mi opinión, más que de investigación, parecería un periodismo de filtraciones, que no es lo mismo. Y no sólo es el caso de Milenio TV, sino como bien admitió Uresti, es el caso de muchos de los medios, incluyendo las grandes televisoras nacionales, Televisa y TV Azteca.

Por supuesto, eso es parte del periodismo también, pero el punto es cómo se da pie a información recibida vía oficial o extraoficial por las autoridades y cómo se balancea con otras visiones.

En este caso y como siempre, parece claro, que más allá del espacio de Uresti y sus decisiones editoriales, los grupos mediáticos como tal juegan también un rol preponderante en cómo se abordan las grandes noticias.

Uresti y Milenio TV podrán ir limpiando su imagen y recuperando su credibilidad. Pero, para hacerlo de largo plazo, ellos y los otros grupos mediáticos, deberían comprometerse y ser congruentes con el tipo de contenidos y profesionalismo que quieren ofrecer a la audiencia en todos los casos, no sólo en unos programas y en otros no, no sólo en unas ciudades y en otras no, no sólo en casos emblemáticos, sino en todos.

Monterrey, México en general, se merecen una mejor televisión, un mejor periodismo y contenidos con valores congruentes y consistentes. Es decir, que se decidan ya a ser sólo el Dr. Jekill y olvidar ya a Mr. Hyde.

*Alejandro Navarrete es periodista y consultor de comunicación

16 de mayo de 2022