Vianey Pérez Angeles
El periodista Daniel Lizárraga regresa a México luego de que el gobierno de Nayib Bukele ordenara su expulsión de El Salvador el martes, el periodista de “El Faro” acusó que se trata de un ataque del gobierno para presionar al medio de información.
Esta mañana, Lizárraga declaró en el aeropuerto internacional de El Salvador: “estoy cumpliendo en tiempo y en forma el plazo que me dio el Gobierno del presidente Bukele para abandonar el país, creo que esto no es personal, pero sí es un ataque contra “El Faro”, y es un intento más por tratar de detenernos”.
“Parece que en el Gobierno salvadoreño está dispuesto a todo, pero deben saber que no nos van a callar, no vamos a dejar de publicar, vamos a seguir ofreciendo la mejor información posible, con todo el rigor posible para informar a esta sociedad como se lo merece. En “El Faro” no hacemos propaganda, hacemos periodismo profesional”, señaló mediante un video compartido en @_elfaro_.
Ayer, el medio de comunicación notificó que agentes de Extranjería del Gobierno Bukele, avisaron al periodista mexicano que se revocaba su permiso de estancia en el país centroamericano, y que se le negaba el permiso de estancia laboral que se gestionaba por parte del diario, para fungir como editor del periódico digital.
La orden se dio bajo el argumento de que no se pudo demostrar que el mexicano fuera periodista, y aunque su permiso de estancia vencía hasta finales de julio, las autoridades le ordenaron abandonar el país en un plazo máximo de cinco días, por lo cual el investigador tomó un vuelo con dirección a México a las 12:15 PM.
Al respecto el medio se pronunció y compartió mediante Twitter: “La expulsión del periodista Daniel Lizárraga ordenada por el Gobierno Bukele este 6 de julio se enmarca en el acoso sistemático que @_elfaro_ y periodistas independientes en #ElSalvador enfrentan desde la llegada de Nayib Bukele a la Presidencia”
Hace unas horas el periodista Carlos Dada compartió en un artículo del periódico digital: “La verdadera razón de su expulsión no es que no pueda acreditar ser un periodista profesional; sino lo contrario: que es un periodista especializado en investigar casos de corrupción. Eso es lo que verdaderamente molesta al régimen de Bukele, tan plagado de escándalos de corrupción como comprometido con proteger a sus propios corruptos”… “La expulsión de Lizárraga es grave pero no sorpresiva: el periodismo capaz de revelar actos de corrupción es un obstáculo serio para los planes de los corruptos”.
Asimismo, recordó la resolución por parte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, donde se emitieron medidas cautelares a favor de 34 miembros de El Faro, luego de las denuncias presentadas durante un año contra el gobierno de Bukele, a causas de abusos de poder, amenazas, seguimiento y hostigamiento a diversos comunicadores. Y aseguró que la expulsión del investigador mexicano no será impedimento para que éste y demás colaboradores “sean puestos al servicio de El Faro y sus lectores”.
“Condenamos este nuevo ataque contra el periodismo independiente y refrendamos nuestro compromiso: el de continuar practicando un periodismo sometido a altos estándares editoriales, y no a gobernantes antidemocráticos que requieren de la amenaza y el hostigamiento para responder a los cuestionamientos sobre su ejercicio del poder”, puntualizó.
Como se recordará, Daniel Lizarraga formó parte de los investigadores del reportaje “La Casa Blanca de Enrique Peña Nieto” del 2014, que exhibió el conflicto de interés entre el expresidente y uno de sus contratistas, que llevó a su entonces esposa, Angélica Rivera, anunciar la venta de la mansión.
