El Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles tendrá un costo mucho menor al previsto para la terminal de Texcoco, y con mayor transparencia en su administración. Será una obra muy grande y moderna, que tiene gran avance y a la que le faltan sólo arreglos cosméticos. Durante nuestra visita, los senadores constatamos la obra en la que participa la Secretaría de la Defensa Nacional, donde nos explicaron que también se trabaja en las vías de acceso al nuevo aeropuerto, comenta la senadora Nancy Sánchez, integrante de una comitiva de legisladores que visitó las nuevas instalaciones en Santa Lucía.
-Senadora, usted formó parte de la comitiva de legisladores que supervisaron el avance de las obras en el aeropuerto Felipe Ángeles. ¿Cómo avanza la obra?
-Es una obra con un costo mucho menor del que se había previsto para el anterior aeropuerto, y con transparencia en su manejo. Llevan más del 80 por ciento de avance; las pistas ya están listas. Las salas están prácticamente terminadas, lo que falta es lo cosmético. Es muy grande y moderna, en la que constatamos el trabajo de la Sedena, porque mucha gente la cuestiona por quienes la realizan. Son ingenieros militares en construcción y mecánicos; también hay otros civiles, pero no son personal del Ejército que esté dejando de atender tareas de seguridad.
-Si ya están las pistas, la torre, ¿qué es lo que falta?, ¿qué les dijeron los ingenieros y qué viene para diciembre, enero, febrero…?
-Falta lo que comento: los acabados, lo cosmético. No vamos a tener como en muchos otros países más de un aeropuerto, vamos a tener uno de primer nivel. Por las especificaciones que nos dieron del suelo y subsuelo, la tierra es apta para una construcción de esa naturaleza que sorprenderá a muchos, porque en cada rincón y espacio se ve a México. Otra crítica recurrente es a los accesos: nos hablaron de tres vías distintas para llegar e incluso en una de ellas están ampliando los carriles. Algo adicional es el hallazgo paleontológico y arqueológico en la zona, donde la misma Sedena está haciendo un museo.
-Surgió la polémica de que algunas empresas no quieran ir al nuevo aeropuerto o que las autoridades de Comunicaciones y Transportes dijeron que quien quiera ir y tener una base en Santa Lucía lo puede hacer, ¿pero esto sería a voluntad de las compañías?, ¿cómo es eso?
-No hablaron de alguna negativa de las empresas. Incluso dijeron que Volaris iba a empezar en marzo cuando funcionara el aeropuerto; que ellos piensan cumplir con la fecha establecida porque ya tenían vuelos pactados, aerolíneas pactadas. No puedo especificar cuáles, pero nunca comentaron de un problema por parte de las líneas aéreas.
-¿Y les hablaron de otros problemas, de algún inconveniente?
-Dijeron que cuando se compró tierra a las poblaciones aledañas para tener las tres mil 700 hectáreas del aeropuerto, hubo compromisos de obra pública que le corresponden a la Secretaría de Desarrollo Agrario. Preguntamos qué pasaba con eso y comentaron que no ha habido respuesta de la Sedatu. Si hubo un compromiso se tiene que cumplir, es algo que nos trajimos de pendientes como legisladores para poder incidir en eso.
-¿Entonces la capital del país tendría en funciones el aeropuerto en marzo próximo?
-Si siguen igual, con el mismo ritmo que va la construcción, ellos consideran que van a cumplir con las fechas de marzo de 2022.
-Esta es una de las obras más importantes del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador. Y parece que no hay ningún obstáculo para que se concrete, lo cual le daría credibilidad a esta administración.
-No tendría por qué haber obstáculos, pareciera que sobre todo la oposición quisiera que sí, pero no los hay. Obras de este tipo deben concretarse, como el aeropuerto, México las necesita.
-Usted sabe que en todos los aeropuertos hay muchos negocios: renta de taxis, venta de ropa, restaurantes. ¿Les hablaron algo de esto?, ¿hay interés de empresas para instalarse en Santa Lucía?
-Dentro del aeropuerto ya hay áreas establecidas para comercios, incluso llegué a ver algunos nombres, no puedo precisar cuáles, pero ya están arreglando algunos espacios. Sin embargo, no tratamos ese tema.
-Senadora, ¿cuándo quedaron en regresar?, ¿cuáles son sus planes respecto a la verificación o ver cómo va el aeropuerto?
-No es nuestra función ir a verificar, pero sí tenemos mucho interés en estar pendientes e informar oportunamente el avance del aeropuerto. Quedamos de una invitación para ver el museo que están construyendo.
-Si esta obra se llegara a concretar, sería un logro más del presidente López Obrador. ¿Qué nos puede decir al respecto?
-Tengo la seguridad de que se va a concretar. Es una obra que está avanzando y se va a concretar sin excesos, con transparencia y sin conflictos con las comunidades. Vamos a estar inaugurándola el año próximo, como está previsto.
-¿Va usted a informar a sus paisanos de Baja California acerca de este avance?
–Ya lo he estado haciendo en mis redes y en algunas entrevistas con quienes han tenido interés en saberlo. Aquí en la Ciudad de México, padecemos el problema de la saturación del aeropuerto. (Redacción)
