El Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que en el rubro económico “vamos a crecer este año alrededor del seis por ciento”, además resaltó que los pronósticos favorecen a México, pues ya se está superando la crisis que produjo la pandemia, por lo cual se mostró optimista y auguró que “vamos a crecer en promedio cinco por ciento anual”.
Para el presidente, México cuenta con dos oportunidades que pueden servir para impulsar el crecimiento económico: el T-MEC y el turismo. Respecto al primero resaltó su importancia por el incremento de inversiones por parte de EEUU en territorio mexicano: “está creciendo el número de empresas que se están instalando, la creación de empleos para la producción de exportación. México es de los pocos países en el mundo en donde se puede invertir para producir bienes, es donde hay condiciones favorables para la inversión productiva, porque tenemos garantizado un mercado, el más importante del mundo.”
Del mismo modo, recordó que “viene un plan ahora en Estados Unidos para crear infraestructura y también significa muchos recursos económicos”. Respecto a ello subrayó la importancia de la fuerza laboral de los migrantes, por lo que resulta apremiante convencer al presidente Biden “que se puede regularizar, ordenar el flujo migratorio, porque se necesita fuerza de trabajo. De ahí el planteamiento nuestro, vamos a que se otorguen visas temporales de trabajo.”
En cuanto al turismo, aseguró que “nos va a significar mucho desarrollo futuro. Ya Cancún ya está recuperado, ya está en la situación que se encontraba antes de la pandemia y va hacia adelante, y lo mismo otros sitios turísticos, otras ciudades turísticas.” Detalló que México es uno de los mejores centros turísticos, debido a que cuenta con una gran cantidad de bellezas naturales y diversidad cultural, e incluso puede superar destinos como Atenas y Egipto.
En cuanto a las acciones que se llevarán a cabo, destacó que se seguirá “promoviendo el desarrollo, va a llegar a inversión extranjera y también va a haber inversión privada nacional, porque la inversión extranjera también jala la inversión privada nacional. Y nosotros estamos, como nunca se había hecho, o ya llevaba tiempo de no invertirse, presupuesto público en grandes obras. El Tren Maya, el Istmo, el aeropuerto, todas estas obras significan muchos empleos, reactivar la economía.”
Finalmente, se comprometió a que el crecimiento sería en todas las regiones de la república, pues en el pasado únicamente se apoyaban determinadas regiones y se abandonaban o había poco crecimiento en otras, por lo cual, buscará el crecimiento de las rezagadas sin descuidar las demás: “El sureste es otra cosa, ya no es la región que decreció por décadas. Mientras crecía el centro, el Bajío, el norte, el sureste no crecía, sólo Cancún, pero el resto de Quintana Roo no tenía crecimiento, Yucatán también estaba sin crecimiento, Campeche, Chiapas, Tabasco, Veracruz, Oaxaca. Ya no es así, ya ahora el sureste está creciendo. Y no se trata de que haya más inversión en el sureste y se abandone el norte o el Bajío, no, vamos a seguir atendiendo todo México.”
