Ante la ola de acusaciones hacia las redes sociales (sobre todo las pertenecientes a la plataforma Meta) respecto al temor de que no sean espacios seguros para los usuarios, la plataforma Twitter declaró que desde hace algunos años desarrolló un proyecto para la protección de los tuiteros más vulnerables.
Dicha herramienta fue llamada Proyecto Guardián y consta en que los administradores de la plataforma identifiquen a los usuarios más vulnerables de sufrir acoso por parte de otros cibernautas. Se pone énfasis en que no necesariamente son cuentas grandes, pero sí que cumplen con ciertas características.
Algunas de ellas son que el usuario se haya hecho famoso por algún hecho en particular o si el algoritmo registra que sube contenido polémico respecto a ciertos temas. Los individuos pueden ser beneficiarios de esta herramienta sin siquiera saberlo, pues no se les notifica de ello.
Posteriormente a la identificación de cuentas, éstas son marcadas para que en cuanto la persona suba un tuit, un grupo de especialistas lo revise y determine si es una fuente potencial para atraer acosadores. Con prioridad en la revisión sobre usuarios regulares de la web.
Si el especialista determina que efectivamente la publicación podría traer problemas al tuitero, ésta se elimina, se bloquearán los comentarios ofensivos o simplemente se le da menor difusión, con el objetivo de evitar que se haga viral y la persona se sienta insegura dentro de la plataforma.
Proyecto Guardián ayuda a miles de cibernautas, entre los que destacan periodistas, activistas, políticos y artistas de todas partes del mundo. No se ha dado a conocer si hubo un hecho en particular para establecer dicha herramienta, sin embargo, se considera de gran ayuda para los tuiteros.
(AMFP)
